DOS mil ocho

Creo sinceramente, que algo no estoy haciendo bien con los supuestos propósitos de año nuevo; los ennumero bien, tratando de que sean concretos y si se puede, seguirlos en el estricto orden de como van surgiendo, o según la realidad me permita ejecutarlos.
Sospecho que en la ejecución está el detalle, eso explicaría el porque al levantarme tengo la sensación de habar olvidado algo, no refiriéndome a objetos, sino a tareas.
Pasando al recuento 2007, no estuvo flojo, pero tampoco se cumplió al 80%, hubieron trabajos buenos, como en Viper, y algún independiente que me contrató, del que aún tengo uno trabajando; la animación sigue entre altibajos, tratando de salir; sorprendentemente, ya están por arrancar otros trabajos de los que pensé no tener noticias sino hasta el mes entrante, y aunque tengo guardados proyectos personales, dudo en tratar de colarlos a algún sitio, por lo menos durante el primer tercio del año.
El dinero no llegó a carretadas, y mucho menos me sacó de pobre, pero si me permitió estar holgado, y siguiendo mi vocación de dibujo; espero sinceramente, que así se mantenga, y claro, yo he de procurar que así sea.
Ahora debo hacer cuentas y decidir donde me quedo, o como quedo, concentrarme en un viaje muy esperado y en varias cosas que me tendrán ocupado por lo menos 3 años, aunque signifique tristemente, decirle adiós al cómic, por lo menos en ese tiempo, nunca se sabe, y tampoco puedo estar sin hacer nada.
Cosas buenas y malas, y de todo eso, por unanimidad (y sin duda alguna), mi visión fué lo mejor de ese año...

-EGO SUM CREATURA NOCTIS-